Mezcla de forraje de maíz y soya para incrementar el contenido de proteína del ensilado

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Por Jonathan R. Garay Martínez, Lorenzo D. Granados Rivera, Nicolás Maldonado Moreno/ INIFAP

En las unidades de producción bovinos carne y doble propósito, durante la época seca hay poca disponibilidad de forraje de calidad. Por ello, los productores tienen que utilizar pastos en estado de madurez avanzado y residuos de cosecha (maíz y sorgo), los cuales presentan contenidos bajos de proteína cruda <6 %. En la dieta de los rumiantes, la proteína es el nutriente más caro y durante esta época crítica, los concentrados duplican su precio, en consecuencia, la rentabilidad de las unidades de producción disminuye (Bautista-Martínez et al., 2020). Por lo anterior, existe la necesidad de conservar forraje de calidad y utilizarlo como complemento en la dieta de los rumiantes durante esta época crítica, una alternativa es el ensilado (Daniel et al., 2019).

El forraje de maíz es el más utilizado para ensilar, es rico en energía, entre 2.0 y 2.3 Mcal kg-1 de materia seca (MS; Erdal et al., 2016); pero pobre en proteína, ya que los contenidos oscilan entre 60 y 90 g kg-1 de MS (Zhao et al., 2021). En cambio, el forraje de soya por ser una leguminosa tiene contenidos de proteína cruda que oscilan entre 140 y 200 g kg-1 de MS.

Se puede elaborar un ensilado que contenga 60% de forraje de maíz (Zea mays) y 40% de forraje de soya (Glycine max). El maíz se debe cosechar cuando se encuentre en estado lechoso-masoso y la variedad de soya ‘Huasteca 200’ cuando las semillas se encuentren completamente desarrolladas en las vainas (etapa reproductiva R6; Figura 1). Ambos cultivos se siembran en la misma fecha, pero el material de maíz a utilizar debe ser de ciclo precoz, para asegurar la sincronía con la soya.

Beneficios esperados. Al mezclar el forraje de maíz y soya y ensilarlos, el contenido de proteína en el ensilado se incrementa hasta en 57 % (Cuadro 1); además se incrementa el contenido de energía neta (lactancia y ganancia) y minerales (Fósforo, Calcio y Potasio). Además, se asegura el adecuado proceso de fermentación (estabilidad del ensilado: pH <4.0).

Ámbito de aplicación. En las regiones del trópico cálido y semicálido donde se las condiciones ambientales permitan establecer los cultivos de maíz y soya.

Costo estimado. En condiciones de riego, el costo de producción, incluidos la cosecha de forraje y ensilado de una hectárea de maíz y soya es de alrededor de $14,000.00 y $17,000.00 y el rendimiento de forraje verde es de 39 y 14 t, respectivamente. Entonces, los costos de una tonelada de forraje verde de maíz y soya se estiman en $358.97 y $1,214.29, respectivamente. Por lo tanto, el costo de una tonelada de ensilado de maíz (60%) y soya (40%) es de $701.10.

LITERATURA CITADA

BAUTISTA-MARTÍNEZ, Y., GRANADOS-ZURITA, L., JOAQUÍN-CANCINO, S., RUIZ-ALBARRÁN, M., GARAY-MARTÍNEZ, J.R., INFANTE-RODRÍGUEZ, F., GRANADOS-RIVERA, L.D. 2020. Factores que determinan la producción de becerros en el sistema vaca-cría del Estado de Tabasco, México. Nova Scientia 12(25): 1-21.

DANIEL, J.L.P., BERNARDES, T.F., JOBIM, C.C., SCHMIDT, P., NUSSIO, L.G. 2019. Production and utilization of silages in tropical areas with focus on Brazil. Grass and Forage Science 74(2): 188-200.

ERDAL, S., PAMUKCU, M., CUREK, M., KOCATURK, M., DOGU, O.Y. 2016. Silage yield and quality of row intercropped maize and soybean in a crop rotation following winter wheat. Archives of Agronomy and Soil Science 62: 1487-1495.

ZHAO, C., WANG, L., MA, G., JIANG, X., YANG, J., LV, J., ZHANG, Y. 2021. Cellulase interacts with lactic acid bacteria to affect fermentation quality, microbial community, and ruminal degradability in mixed silage of soybean residue and corn stover. Animals 11(2): 334.